Bilbao Shemale Escort Review: Ivete Montello - Mi debilidad
Autor: ILV2016
Hola a todos.
Este relato se remonta
Después de mi primera vez, en la que no salí muy contento por mis nervios, me decidí por probar con Ivete, me encantaban y me encantan sus fotos. La llame para preguntarle, más bien fue una llamada para oír su voz, me encantó, estaba muy nervioso pero aún así me decidí a visitarla, el cariño de su voz fue lo que me llevo a quedar con ella.
Cogí el metro y fui para donde recibe, para mi ahora es un templo. Salí con mucho tiempo, me gusta ser puntual. En el metro solamente me faltaba sudar con esos nervios que todos sentimos antes de una cita y la maldita línea 6 va y se queda parada más de 15 minutos... Pufff no quería llegar tarde y los nervios iban a más... Decidí mandarla un sms, ya que no sabía si llegaría a tiempo. A los pocos minutos de mandar el sms... Ivete me llama, entre la mala cobertura, los nervios y un vagón a rebosar de gente... me quedé en blanco y le pedí que por favor me mandara un sms, ella accedió sin problemas. Su sms me decía no te preocupes cariño, llámame cuando llegues, ¿Con que ropa quieres que te reciba? Pufff simplemente de pensarlo me empalmé en el metro. Le pedí que me recibiera con un vestido y sin nada debajo, cosa que luego sería un total acierto.
Llegue a su portal y la llamé, enseguida estaba delante de su puerta... abierta... pensaba que el corazón se me saldría del pecho, pasé y me encontré a una mujer bellísima que enseguida me besó y me tranquilizó con su conversación... tras unos minutos ella se sentó y yo seguía de pie frente a ella, ya se le marcaba su herramienta y no paraba de mirarsela. Ella se dio cuenta enseguida y abrió aún más sus piernas. Tras unos minutos me mandó callar y me dijo... veo que te gusta mi polla y se subió el vestido un poco mostrando un poco una herramienta enorme, pero sin estar todavía dura, ummm. Llegados a ese punto... alargó su mano y me agarró llevando mi mano a su polla. Empecé a chupar como nunca, cada vez se ponía más dura y grande, sabía genial... me apretaba la cabeza para metermela hasta la garganta, se levanto y siguió dándome caña, me caía la saliva por todo el pecho y ella se reía.
De repente me saco su polla a punto de reventar de lo dura que estaba y me la restregó por la cara. Cogió mi saliva con su mano y me mando ponerme a 4 patas. Utilizó mi saliva para meter un dedo, dos... y después... su pollón, poco a poco, sin prisas, pufff que gusto... noté sus huevos en mi culo.
Comenzó a bombear sin parar, diciendo que era su perra, no sentía nada de dolor, era increíble. Me cambió de postura, esta vez nos mirábamos de frente, ummm como me besaba. Me folló de pie, sentado sobre ella, frente al espejo... y al final encima suya hasta que me corrí. La llené enterita, le llego hasta el pelo... Nunca me había corrido de esa manera.
Me quedé con ganas de la corrida de mi diosa, pero me prometió que ala siguiente la tendría.
Estuvimos hablando un poco, no se cuanto tiempo pasé con ella, pero salí con un temblor de piernas tremendo.
Me quedé enamorado de Ivete desde ese momento.
Added on December 08, 2016 at 12:00 am